Ya tengo mi nuevo kit para aprender a hilar!
Ya veremos cómo se me da esto de hilar pues es totalmente nuevo
para mí.
El kit se compone de 100gr.de lana virgen y un huso.
La lana es de oveja Pallaressa, un tipo de oveja autóctona
que se intenta proteger ya que cada vez hay menos pastores y también menos
rebaños.
Bueno, pues armada de
voluntad y ganas, abrí la caja y desenrollé la lana. Leí las instrucciones que
me parecieron tan claras y tan sencillas que estuve segura que esto era como un
juego de niños y mentalmente ya tenía
unos calcetines, una bufanda y
hasta un jersey hilado y tejido.
Solo se trataba de ir estirando de la lana mientras retorcías
el hilo!
Haces una hebra larga, la enrollas en el huso que hace de contrapeso
y a hacer kilómetros.
Pero no hay nada ni tan
fácil, ni tan rápido, sino no se habrían inventado las máquinas para hilar y
tejer.
Los primeros centímetros iban bien pero
de pronto la hebra empezó a romperse. Bueno no pasa nada pensé, ya cogeré
el hilo. Seguí intentándolo pero se resistía una y otra vez.
Pobre Blaquit a mis
pies como dándome ánimos.
La verdad es que la paciencia no es mi gran virtud pero
la cabezonería algunas veces sí que lo
es y esta vez me funcionó.
Al final me di cuenta de que la lana al cardarla coge una
dirección que al hilar tienes que seguir.
Por fin conseguía hacer trozos más largos y conseguí hacer
mi madejita.
La verdad es que si tuviéramos que lavar la lana, cardarla, hilarla
y tejerla valoraría mucho más los jerséis que tenemos. Que fácil parece todo
cuando no lo tienes que hacer tu mismo!
La
verdad es que una vez cogida la práctica resulta muy relajante ver como las
fibras se van estirando y enrollando! pero claro con 100gr. no me salen ni unos
calcetines así que….
¿creéis que lo conseguiré?
Creo que el próximo paso será encontrar una rueca ¿no?